La columna de Daniel Abot: "Estamos perdiendo el sur y nuestra soberanía"
En su columna del viernes en Primera Mañana, Daniel Abot criticó la gestión de incendios forestales en el sur del país, donde solo se ejecutó el 24% del presupuesto para prevención. Señaló que esta crisis ambiental refleja una lógica de despojo territorial impulsada por grandes inversores interesados en explotar recursos naturales.

En su columna habitual de los viernes en "Primera Mañana", en la 99.5, Daniel Abot brindó su visión sobre diversos temas de actualidad, centrando sus comentarios en la situación política y social que atraviesa el país. A lo largo de la entrevista, Abot reflexionó sobre las decisiones gubernamentales, la marcha que tuvo lugar recientemente, y las políticas públicas que afectan a la salud, educación, y la soberanía nacional.
En relación a la marcha, Abot manifestó: "Hay que apoyar todas las expresiones que hoy en día están siendo avasalladas por este gobierno". Destacó que, a su entender, el gobierno ha llevado adelante medidas que no solo afectan a la comunidad en general, sino también a la salud, educación, ciencia y tecnología. En este sentido, cuestionó fuertemente el giro hacia la mercantilización del deporte, que, según él, ha dejado de ser un espacio de lucha colectiva para transformarse en un negocio.
Abot continuó su reflexión con duras críticas a la justicia y la corrupción que, según él, es una constante en el país. "La justicia que nos gobierna considera como normal la estafa económica y financiera", afirmó. Para él, esto es solo una muestra de lo que está ocurriendo en distintos sectores del país, en los cuales se favorecen los intereses de unos pocos, mientras que la mayoría de la población sufre las consecuencias de políticas públicas mal implementadas.
Uno de los temas más complejos tratados durante la charla fue el conflicto en Gaza y las tensiones geopolíticas internacionales. Abot expresó su desconfianza respecto al "alma caritativa" de las potencias mundiales. “¿Por qué de golpe salió ese alma caritativa con una inversión de 80 mil millones de dólares?”, cuestionó, refiriéndose a los planes de reconstrucción en Gaza y asegurando que detrás de estos esfuerzos humanitarios existen intereses geopolíticos, como la explotación de los recursos energéticos en la región.
En otro de los momentos clave de la entrevista, Abot se refirió a la crisis ambiental en el sur del país, donde los incendios forestales han destruido grandes extensiones de tierras. "La Prevención del Fuego ejecutó solo el 24% de su presupuesto", señaló, remarcando la ineficiencia de las autoridades en la gestión de los incendios. Para él, la situación no solo afecta a los habitantes de esas regiones, sino que responde a una lógica de despojo territorial, donde grandes inversores buscan apoderarse de recursos naturales para explotarlos turísticamente.
Cuando se le preguntó sobre las medidas adoptadas por algunos gobernadores en oposición a las políticas nacionales, Abot reiteró que lo más importante es mantener las convicciones. "Hay que actuar de acuerdo a tus convicciones, no al resultado electoral solamente", subrayó. En un país donde la política parece moverse por intereses de corto plazo, Abot se mostró firme en su postura: la lucha por la justicia social y el bienestar colectivo debe ser el motor de toda acción política.
A lo largo de la charla, Abot también abordó la falta de apoyo institucional a causas como la salud, la educación, y los derechos de los jubilados y personas con discapacidad. "La falta de convicción en las ideas es lo que hace que la política se transforme en un juego de intereses", afirmó. Para él, la verdadera lucha política es la que se sostiene con principios sólidos, sin importar la conveniencia electoral.
Con respecto al futuro del país, Abot dejó claro que no se puede esperar un cambio real si no se vuelven a priorizar los valores de solidaridad y justicia. En su opinión, la falta de estos principios ha causado un deterioro generalizado en las instituciones y en la vida cotidiana de los ciudadanos. "Si la gente no puede mandar a sus hijos a estudiar como antes, se dará cuenta de que estamos perdiendo algo esencial", concluyó.